Las haciendas forales vascas anunciaron hace varios meses la implantación inminente de un plan integral contra el fraude y la economía sumergida. Todo bien hasta aquí, puesto que la Ley lo es para todos.
Sin embargo, dicho anuncio hizo saltar las alarmas de multitud de empresarios, y especialmente los pequeños autónomos que tienen un modesto negocio como un bar, un ultramarinos, una mercería, etc.
El plan de las haciendas forales consiste en la implantación de un sistema de control de la facturación a través de lo conocido como «ticketbai». La tecnología a disposición del cumplimiento de la legalidad. Dicho sistema permite que hacienda sea conocedora en tiempo real de las ventas e ingresos de todos los negocios del territorio, en el mismo momento en el que el barman (siguiendo con un ejemplo de hostelería), registra en su caja la venta de una cerveza. De esta manera se pretenden conseguir dos objetivos: la entrega obligatoria del ticket al consumidor, y evitar la comisión de un fraude en cuanto a no declarar la venta de la cerveza.
Hasta aquí, todos podríamos estar de acuerdo en la idoneidad de la medida. Sin embargo, ¿Cuándo y como se llevaría a cabo la implantación de este sistema? Y en la respuesta a esta pregunta está el verdadero problema. Para el correcto funcionamiento de este sistema, es necesaria la adquisición de una tecnología avanzada por parte de los negocios, que en ocasiones alcanzaría una inversión superior a los 3.500€.
Tal es así, que en los casos de Bizkaia y Guipúzcoa las haciendas forales han empatizado con las demandas de los comerciantes y empresarios y han adoptado determinadas medidas de flexibilización en cuanto a la entrada en vigor de la medida, como por ejemplo, retrasar la entrada en vigor obligatoria del sistema ticketbai, otorgando ventajas fiscales y exenciones a quienes por voluntad propia decidan la implantación del sistema con anterioridad a la fecha de implantación obligatoria, prevista en 2023.
Arabadendak Agrupación de Asociaciones pide el retraso de la implantación
Llevamos meses realizando una ronda de contactos con las organizaciones y sectores a los que representamos a través de ARABADENDAK así como con las instituciones públicas implicadas, tanto en Vitoria-Gasteiz como en las 7 cuadrillas alavesas.
Detectamos una inquietud que sobresale de manera especial por encima de las demás, se trata de la repercusión que la inminente implantación del TICKET BAI puede suponer en sus negocios. Nos vamos acercando peligrosamente a las fechas marcadas por la Diputación Foral de Álava, para la implantación de este sistema de facturación tan riguroso para el que, ni mucho menos, estamos preparados.
Solicitamos un retraso en la implantación, para disponer de tiempo que nos permita analizar las alternativas y soluciones que existen en el mercado.
La recogida de firmas la han iniciado a través de la plataforma Change.org, y se puede acceder haciendo click aquí.